Algunos les tienen pavor a los payasos (no los culpamos) y otros les temen a las alturas (¡los entendemos bien!). En cambio, hay personas que le tienen miedo al fracaso, una fobia que les hace pensar que fallar es un error imperdonable; un pecado capital, casi.
Si estás leyendo este artículo, seguro que sufres de miedo a fallar, y déjanos decirte que no estás solo. Muchas personas en todas partes del mundo luchan con la idea de que no serán capaces de lograr lo que se proponen, llenándoles de temores y de inseguridades.
La buena noticia es que el temor al fracaso, como muchas fobias, se puede superar. En este artículo, te hablaremos un poco más de este miedo y te daremos algunos consejos para que vivas al máximo y que nada te impida cumplir tus metas y tus sueños. Baja el cursor.
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¿Qué es el miedo a fallar?
El miedo al fracaso (o atiquifobia, como le llaman los psicólogos) es un temor extremo a cometer algún tipo de error. Las personas que sufren esta fobia tienen una visión negativa y catastrófica de la vida, lo que les lleva a suponer que fracasarán en cualquier intento.
Las personas que tienen miedo a fallar tienden a sobreanalizar las situaciones y a anticiparse a los resultados, y esperan lo peor todo el tiempo. Esto les genera ansiedad y les mantiene dentro de su zona de confort, donde todo se mantiene igual y no se corren riesgos.
Sin embargo, hay personas que, por el temor al fracaso, ¡se vuelven muy perfeccionistas! A la hora de realizar cualquier tarea, dan todo de sí para evitar cualquier error. Eso parece bueno, pero la verdad es que es superagotador, te genera demasiada presión y angustia.
¿Cuáles son las causas del miedo al fracaso?
Una parte del miedo al fracaso se debe a la sociedad que nos rodea. Vivimos en un mundo donde la perfección está sobrevalorada; nos esforzamos tanto por ser perfectos y por cumplir expectativas altas que el temor a cometer errores nos paraliza.
También, influye mucho la baja autoestima. Cuando tienes una imagen negativa de ti mismo, es muy fácil sufrir de miedo a fallar y hay una molesta voz en tu cabeza que te dice que no eres capaz de lograr tu meta. Ignórala, ¡eres mucho más fuerte de lo que crees!
Otra de las causas del miedo al fracaso es algún trauma de infancia. Las personas que han crecido con padres autoritarios son propensos al temor a fracasar, puesto que han aprendido a ganar afecto gracias a sus buenos resultados; eso hace que sean muy autoexigentes.
¿Qué consecuencias tiene el temor al fracaso?
El miedo al fracaso te mantiene en una zona de confort, lo que no es nada bueno porque te pierdes cosas emocionantes e interesantes. Evitar situaciones en las que sientes que vas a fallar te impide cumplir tu ikigai, o sea, tu propósito de vida, y lo que tanto sueñas.
Otra de las consecuencias del miedo a fallar es sufrir de ansiedad. El temor que sientes antes de intentar algo nuevo puede causarte dolor de cabeza, sudores, mareos, falta de aire y temblores. En momentos así, respira hondo y piensa que ¡nada es tan malo como parece!
El temor al fracaso puede afectar tu autoestima si dejas que se apodere de tu mente. En muchas ocasiones, es inevitable compararse con los demás, por lo que, al “no tener lo necesario” para hacer ciertas cosas, te sientes culpable, menos valioso y como todo un perdedor.
¿Cómo se puede superar el miedo al fracaso?
¿Se puede superar el miedo al fracaso? Claro que… YES! Lo primero que debes hacer es entender que cometer errores es muy normal y nos hace aprender; a fin de cuentas, no somos robots. Además, puedes seguir estos consejos para hacerle la guerra a tu fobia:
1. Dile “sí” a los errores, abrázalos
Como dice una frase del artista marcial Morihei Ueshiba: cada error nos enseña algo. No quieras que todo salga perfecto, acepta la vida con todo lo que traiga, sea bueno o malo. Siguiendo esa filosofía, serás mucho más feliz y estarás más abierto a probar cosas nuevas.
2. Y aprende de tus equivocaciones
Si te equivocas, ¡no te castigues! Mejor, busca un lugar tranquilo, haz un poco de introspección e identifica tus fallos. Saber lo que no has hecho tan bien o lo que has dejado de hacer en una determinada situación puede serte de mucha utilidad para el futuro, créenos.
3. Deja de vivir en el pasado
No te tortures recordando, una y otra vez, los momentos en los que has cometido errores o que no has tenido éxito. Esos recuerdos pueden activar tus temores y llenarte de inseguridades y de dudas irracionales. Ya lo sabes: aprende de esas experiencias y sigue adelante.
4. No dejes que las emociones negativas se apoderen de tu mente
Fallar en una tarea puede generar angustia, frustración y tristeza, y aumentar tu temor al fracaso. Por eso, es muy importante que aprendas a gestionar tus emociones. En circunstancias así, respira, medita, piensa en tus victorias e intenta analizar la situación objetivamente.
5. Evita las comparaciones
No te compares con el amigo de la amiga de tu hermana que ha tenido mucho éxito en su vida; en todo caso, inspírate con sus logros. Ten en mente que no todos vivimos en las mismas circunstancias y que cada uno tiene sus propias fortalezas y sus puntos débiles.
6. Fija metas pequeñas
Puedes enfrentar tu miedo a fallar aplicando el kaizen; esta filosofía de vida japonesa se enfoca en generar cambios positivos a través de pequeñas acciones realizadas en tu día a día. Comienza a fijar metas fáciles de alcanzar que representen un desafío para ti.
7. Luego, plantéate objetivos más ambiciosos
Cuando te sientas fuerte, fija metas más grandes y que te saquen de la zona de confort para siempre; tal vez, conseguir otro trabajo o mudarte a un país nuevo. Cambiar de ambiente te inspira y te hace enfrentarte a retos que te hacen creer en todos los aspectos.
8. Busca ayuda profesional
Si sientes que el miedo al fracaso es más grande que tú y que está afectando tu vida más de la cuenta, ¡busca ayuda profesional! Un consejero o un psicólogo pueden ayudarte a encontrar la raíz de tus temores y darte herramientas para enfrentar los nuevos cambios.
Como dice el escritor Eduardo Sacheri: es mucho más hermoso fracasar en algo que nos gusta. Trabaja en tu miedo al fracaso y no dejes que tus temores y tus inseguridades te impidan hacer lo que sueñas. La vida es una sola y ¡debes empezar a vivirla! Nos leemos.
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